Aunque nos parezca extraño, gran parte de la población sufre de bruxismo, una enfermedad que consiste en apretar de forma inconsciente la mandíbula. El síntoma más frecuente de esta afección es el rechinamiento de dientes incluso mientras dormimos, algo que resulta muy incómodo a la persona que lo sufre y que suele desencadenar en otros problemas.
Pero esta patología tiene solución, evitando así los síntomas relacionados como puede ser el desgaste de los dientes, dolores en la mandíbula, mordidas en el interior de las mejillas, aumento de la sensibilidad dental o dolores de cabeza provocados por la presión.
Algunas causas que provocan el bruxismo pueden ser el estrés, ansiedad u otra patología, la cual puede ser identificada por un dentista. Otros factores que favorecen su aparición son la falta de sueño o el consumo de sustancias excitantes, como el alcohol, drogas o la cafeína. En los casos de niños, esta enfermedad se puede relacionar con el crecimiento.
Cómo podemos evitar el bruxismo
Desde la Consulta del Dr. Escariz queremos compartir con vosotros los medios más utilizados para acabar con el bruxismo:
- El uso de una férula de descarga. Cuando estos dolores aparecen, lo normal es asistir a un dentista para que nos aconseje cual es la mejor opción de férula que debemos utilizar.
La férula de descarga se coloca en los arcos dentales, normalmente durante la noche, para así amortiguar la presión ejercida sobre los dientes. Se componen de resina, un material perfectamente inofensivo y totalmente seguro.
- Ejercicios específicos. Algunos de los ejercicios que podemos realizar para reducir el dolor y relajar la musculatura son:
- Masajear la zona de la articulación con movimientos circulares con los dedos de la mano.
- Masajear las sienes y la zona superior del pómulo, también con 2 o 4 dedos de la mano.
- Estirar las cervicales, tanto anteriores como posteriores.
- Además, también es recomendable asistir al fisioterapeuta para una mejor y más segura recuperación.
- Botox: en la consulta del Dr. Escariz podemos reducir el bruxismo gracias a la toxina botulínica, a través de pequeñas infiltraciones en el músculo masetero se consigue relajar los músculos maxilofaciales.
La proteína actúa para unir el músculo y el nervio que produce la contracción de la mandíbula. Además de disminuir, o incluso eliminar el bruxismo, con el botox podemos llevar a cabo una mejora estética, ya que una de las consecuencias de esta patología es el ensanchamiento de la zona mandibular, provocada por la continua contracción del músculo.
El efecto podremos disfrutarlo durante 4-6 meses, como cualquier tratamiento con toxina. Se realiza en la propia consulta y de forma ambulatoria. No impide la incorporación laboral o social.
Si quieres más información sobre este tratamiento, contacta con nosotros en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. y te aconsejaremos de la mejor opción para tu caso.