Tener una nariz desviada no solo puede afectar la estética del rostro, también puede dificultar la respiración y repercutir en la calidad del sueño o el bienestar general. Si sientes que algo no va bien al respirar, que tu nariz no encaja del todo con la imagen que deseas proyectar o que ciertos síntomas se han vuelto parte de tu día a día, quizá ha llegado el momento de plantearte una corrección del tabique nasal.









