Cada vez más jóvenes solicitan tratamientos con toxina botulínica. El tratamiento con toxina botulínica preventivo evita que se formen las arrugas en primer lugar.

Siempre ha habido personas influyentes que han hecho que la gente quiera cambiar su apariencia. Iconos como Marilyn Monroe, Pamela Anderson o la familia Kardashian empezaron a dar normalidad a  las operaciones de cirugía estética. Actualmente, con el boom de las redes sociales (los stories de Instagram, las fotos de Facebook, los selfies…) el aspecto y la apariencia tienen un papel cada vez más importante.

Por eso cada vez son más las mujeres y hombres  jóvenes que están incorporando este tratamiento en su rutina de belleza mucho antes de que lo necesiten estrictamente. El tratamiento con toxina botulínica preventivo no elimina las arrugas sino que evita que se formen en primer lugar.

La toxina botulínica es una proteína natural que se obtiene del Clostridium Botullinum. Se utiliza desnaturalizada y en dosis muy pequeñas para obtener la relajación de determinados músculos faciales. Selectivamente se infiltra en los músculos faciales que producen las arrugas no deseadas en el tercio superior.

Debido a los mecanismos de defensa del cuerpo, el músculo se recupera, por lo que su acción es reversible y su duración es temporal.

El Botox es comúnmente utilizado por personas de una edad más avanzada como una herramienta para combatir el paso del tiempo. Por ello, muchos jóvenes asumen que no van a pensar en este tratamiento hasta dentro de 15 o 20 años.

Sin embargo, cada vez son más las personas de entre 20 y 30 años que se someten a este tratamiento con el objetivo de frenar la aparición de arrugas y líneas finas.

¿Por qué utilizar Botox preventivo?

Con el tiempo, la piel se debilita y no puede recuperarse eficazmente de los pliegues causados por la risa, la sonrisa, el arrugar la frente y todos los demás movimientos que hace la cara de manera regular. Es recomendable utilizar neuromoduladores como el Botox para relajar los músculos faciales y evitar que aparezcan arrugas.

El mejor momento para empezar a utilizar esta técnica es cuando comienza a desarrollarse los primeros signos de la edad estando en reposo, como líneas alrededor de los ojos,  en la frente, patas de gallo y arrugas alrededor de la nariz.

Con el paso de los años, las líneas de expresión se vuelven cada vez más profundas, por lo que si se empieza a utilizar temprano, en el futuro no será necesario usarlo regularmente.

Si estás interesado en este tratamiento y quieres más información o tienes cualquier consulta no dudes en contactar con nosotros y contarnos tu caso, te aconsejaremos.