Muchas mujeres desarroyan  diferentes las mamas una de otra. Produciendose una asimetría muy notable. Esta diferencia puede ser de forma y/o  volumen. En estos casos las soluciones son muy variadas: reducir, aumentar o elevar. Existen defectos que, aunque a las pacientes que los padecen les parecen rarísimos, son muy comunes y ofrecemos técnicas contrastadas para resolverlas y conseguir una solución más que satisfactoria.

Una de las asimetrías más llamativas son las mamas tuberosas, que  se caracterizan por: 

  • Tener una forma cónica
  • Distancia intermamaria mayor de la habitual
  • Desarrollo incompleto
  • Areolas grandes y dilatadas
  • Asimetría

 

Las causas se deben a una alteración genética de tejido que cubre la glándula mamaria. Esta al estar más rígida que de costumbre, no permite que el pecho se desarrolle adecuadamente. Para corregir esta malformación mamaria, se emplea una técnica quirúrgica que le da volumen al busto y le dota de una forma redondeada, tratando la glándula que esté constreñida, además la areola y el pezón se colocan en la posición y tamaños adecuados. Simetrizando ambas mamas. SE pueden aplicar diferentes técnicas a cada mama, para conseguir un resultado más simétrico y natural.  

Una vez realizada la intervención y evaluado el estado del pecho, el paciente por lo general recibe el alta a las 24 horas. La operación se realiza con anestesia general. Se recomienda el uso de sujetadores posquirúrgicos y en ocasiones una banda torácica para mantener la posición del implante.