Siempre hemos escuchado que debemos evitar el verano para someternos a cualquier procedimiento que implique que nuestra piel pueda verse perjudicada, ya sea depilación láser, un tatuaje o cualquier intervención que genere cicatrices.

Por ello, cuando una mujer quiere operarse del pecho nunca piensa en hacerlo en verano, debido a que el sol y el calor de la época, la playa o el cloro de la piscina pueden debilitar nuestra piel.

Sin embargo, realizarse un aumento de pecho en verano es posible y, además, tiene algunas ventajas que vamos a contarte.

Lo más importante, independientemente de la época del año en la que tenga lugar la cirugía, es seguir las indicaciones de recuperación y cuidado del doctor. El Dr. Escariz siempre te informará del procedimiento y el protocolo a seguir antes, durante y después de la intervención.

La principal ventaja de realizarse esta operación en verano es que, normalmente, en estos meses coincidiendo con las vacaciones de verano, solemos tener más tiempo libre y de descanso, ideal para poder guardar el periodo de recuperación, incluso sin necesidad de tener que pedir una baja laboral. Además, el organismo suele recuperarse mejor cuando nos encontramos relajados y en un entorno tranquilo, por lo que aprovechar el periodo vacacional, alejados del estrés del trabajo, facilitará el postoperatorio. 

Al contrario de lo que siempre hemos pensado, existen algunos factores propios de la época estival que, con el cuidado correcto, no interfieren en la recuperación:

  • El calor no aumenta la inflamación ni el tiempo necesario para la recuperación. El tiempo de recuperación siempre será el mismo, independientemente de la estación del año. Siempre se necesita alrededor de una semana de recuperación y cerca de un mes para que baje la posible inflamación.
  • El sudor no alarga el proceso de cicatrización ni tampoco aumenta los riesgos de infección. Basta con mantener la piel lo más seca posible y seguir los consejos de cuidado, limpieza y cura de las cicatrices, dadas por el cirujano. Aun así, conviene evitar los roces; una buena forma para hacerlo y que evitará la sudoración excesiva es vestir ropa más transpirable, con tejidos ligeros.
  • Podrás seguir yendo a la playa y piscina siempre y cuando evites la exposición directa al sol. Aunque se recomienda no bañarse en agua salada ni con cloro durante las dos primeras semanas de recuperación para evitar riesgos.

El principal inconveniente de realizarnos una intervención en verano, en este caso un aumento de pecho, es la radiación solar. Por ello, es importante proteger tu piel y las cicatrices con una crema solar adecuada 50+, evitando el impacto directo de los rayos de sol en la zona. De esta forma, evitaremos que se formen cicatrices pigmentadas o manchas en la piel.

En definitiva, sigue siempre las indicaciones de tu cirujano, independientemente de cuando realices la intervención, sobre los cuidados que debes seguir durante tu recuperación.